LAGOS & CASTILLOS

Castillo Las Cuevas (CEBOLLEROS), de Serafín Villarán.

Llegan los fines de semana nómadas, con la memoria como única cartografía. Donde el aspa roja marca inalterable esos riconcitos que salvaguardamos como auténticos paraísos.

Maleteros que atesoran, como si de cofres se tratase, los mas diversos enseres......esa sombrilla, cual esférica bandera, que marca nuestros asentamientos......esas tumbonas, a modo de metálicos tronos, sobre los que aposentarnos a la llegada del viaje......sobre la llanura, asentadas neveras, que refrigeran el posterior banquete.

 BILBAO - ARIJA 

Ruta sacada de la GuiaCampsa. Prefiero ir carretera Balmaseda-Villasana-Villarcayo-Soncillo-Arija.

El pantano/playa de Arija, es uno de esos rincones que llaman "con encanto", y que descubrí hace bastante tiempo. En uno de los muchos veraneos por las Merindades, y al que solía acercarme al menos una vez todos los Agostos.

Vista aerea del pantano de Arija.

Si el agua lo permite, suelo posicionarme en la arbolada que hay a la derecha de la imagen.

Detalle de la playa.

En esta ocasión el agua invadia bastante playa. Y encontre la carretera al pueblo con tramos en pésimas condiciones.

En esta ocasión opte por un picnic, con grandes de dosis de tradición, como son el par de filetes de carne empanada (COMIDA) y la siempre eterna tortilla de patatas (MERIENDA). Ambos reposando sobre un pan de pueblo adquirido durante la ruta, aunque llegando con tiempo se puede pasar por la panadería del pueblo. 

Me sorprendió, muy desagradablemente, el pésimo estado de un buen tramo de la carretera que accede al pueblo. Y en menor medida, la de playa que se había comido el agua, no pudiendo acceder hasta mi sitio predilecto que es a la derecha del camping en una de las arboladas. Aunque supongo, que esto ultimo, sera fruto de que no se ha "vaciado" el pantano o que este ha podido ser un año generoso en precipitaciones.

A pesar de lo cual, es una autentica delicia disfrutar de unos breves baños, un rico "piscolabis", una ligera siesta, una sesión de sol (¡¡¡Ojito que quema!!!...preguntar a mi colorada espalda.). Como siempre, todo ello acompañado por una brisa casi siempre presente, y la escasez de gente (para tan privilegiado lugar).

La chispa de la jornada, como siempre, la protagonizo el bueno de Guru. Poco amigo de todo tipo de agua, que no sea la de su cuenco y solamente para beber. Pero en esta ocasión, sorprendió a propios y extraños, al introducirse sin reparos dentro del pantano, hasta que sus pasos dejaron de hacer fondo solido y tras un par de "brazadas" opto por regresar a tierra firme, solicitando mediante diversas piruetas, regresar en su compañía.

Antes de volvernos a poner en marcha, no cuesta nada pararse en el bar del camping, o en cualquier otro del pueblo, a tomar un cafe con hielo. Que en estos momentos, cualquier mínima inyección económica, se agradecerá.

 ARIJA - CEBOLLEROS 

Prefiero carretera Soncillo-Villarcayo-Medina-Trespaderne (10km antes esta Cebolleros).

El Castillo Las Cuevas, se halla en pequeño pueblo de Cebolleros. Y es el sueño de Serafín Villarán Pereda, un ser humano extraordinario, como diría el famoso anuncio de una bebida isotónica.

Aunque de forma bastante rustica, hay carteles continuos, que nos dirigen entre sus callejuelas hasta el castillo. Pero antes siempre suelo hacer una paradita en la fuente/abrevadero de la "plaza", donde saciar la calor, con un par de tragos de su siempre refrescante agua. Y que me traen el recuerdo de mi primera visita, de la cual puede hacer facilmente cerca de 20 años.

Con motivo de estrenar mi bici de ciclista, la cual daría para algún post a pesar de lo poco que la use, y siguiendo a mi motorizado abuelo en su Mobillette, llegamos a puertas del castillo. Donde un ilusionado anfitrión compartió, entre relatos, un vaso de vino para mi abuelo y un "trinaranjus", creo recordar, para mi.

 DENTRO DEL CASTILLO 

Mis detalles favoritos. Abierto Semana Santa, Julio, Agosto y 1ª quincena Septiembre.

Serafín Villarán Pereda; Nacio en 1935, Villarias (BURGOS). Trasladandose en su juventud a Santurce (VIZCAYA). En el año 1977 comienza un sueño, falto de conocimientos pero desbordante de imaginación. En el que pacientes fines de semana y veraneos, ven desfilar carretillas llenas de cantos rodados del río Nela. Tras jubilarse de Altos Hornos (SESTAO), vuelve a Cebolleros para volcarse en su obra. En 1998 fallece a los 66 años de edad, continuando su labor su hija Yolanda y su yerno Luis. Quienes aun prevén 10 años mas de trabajo-hobby, para dar por finalizada la obra, con la realización de una cuarta altura donde se ubicarán cinco habitaciones un salón y una cocina. 

Entrada gratiuta. Aceptan donativos. Bar en planta baja y en la 3ª el Salon-Asador, creo que permiten usar.

P.d; Antes de regresar, no dejéis de pasar por Medina de Pomar. Y subiendo por la cuesta de la plaza, daros el goloseo de medio kilo de pastas. Os recomiendo las de "choco", sobre todo las persianas rellenas de nata.